La diferencia entre los motores de Audi va más allá de la letra F que añade luego de la T. Radica concretamente en el tipo de inyección de combustible que utilizan y las características específicas de cada tecnología. Sigue leyendo para conocer todos los detalles.
No es casualidad que uno de los propulsores haya adquirido mayor notoriedad, como así tampoco que el otro se encuentre en los modelos deportivos o, al menos, de prestaciones superiores. Es cierto que poseen coincidencias como la confiabilidad, rendimiento y eficiencia, pero también diferencias que a continuación te mostraremos.
TFSI, el más deportivo de los motores de Audi
El TFSI (Turbo-Charged Fuel Stratified Injection) es un sistema de inyección directa de gasolina y turbocompresor combinado que desbloquea un poder superior, un rendimiento más dinámico y una mejor economía de combustible en los propulsores de afta.
Esta tecnología permite al sistema TFSI ofrecer un rendimiento deportivo similar al de muchos motores V6 de aspiración natural con más cilindros, pero utilizando entre un 10% y un 15% menos de combustible. En otras palabras, más potencia y menos consumo y contaminación ambiental a partir de reducir las emisiones tóxicas.
TSI, más tradicional
El TSI (Turbocharged Stratified Injection) también es un sistema de inyección directa de gasolina y turbocompresor. No obstante, no utiliza la tecnología de estratificación de combustible. En cambio, se enfoca en la sobrealimentación mediante un turbo para optimizar el rendimiento del motor.
Cabe destacar que, aunque el TSI no alcanza el mismo nivel de eficiencia y rendimiento que el TFSI, continúa siendo una opción potente y económica en comparación con los motores convencionales. De hecho, ambos motores de Audi han sustituido de la mejor manera a otros sin turbo como, por ejemplo, el 3.2.
Asimismo, y en lo que respecta a coincidencias o similitudes, ambas tecnologías (TFSI y TSI), tienen como objetivo principal maximizar la potencia y las performances del propulsor de gasolina mientras se logra una mejor eficiencia de combustible y una reducción en las emisiones contaminantes.
El rendimiento deportivo, la clave
Más allá de las cualidades de funcionamiento de ambos motores de Audi, el TFSI se destaca por su capacidad para ofrecer un rendimiento deportivo y una eficiencia superior mediante la combinación de la inyección directa de combustible y el turbo. Y en un contexto en el que las potencias son cada vez mayores, desempeña un rol más que importante en la firma de los aros.
De esta manera, hay que tener en cuenta que la elección entre un TFSI y un TSI depende de las preferencias y necesidades individuales. Concretamente, si se busca un rendimiento deportivo y una eficiencia mejorada, el TFSI es la opción más adecuada. En cambio, si el objetivo no radica en alcanzar niveles extremos, el TSI es más recomendable.
En conclusión, los motores de Audi TFSI y TSI representan una alta e innovadora tecnología para vehículos que supera a la de los propulsores convencionales. Y si de algo sabe la marca alemana es, justamente, de éxito.
Periodista deportivo. Egresado de DeporTEA, en 2001. Ingresó en Motorpress Argentina en marzo de 2004 y desde entonces se dedica de lleno al mundo de los motores. Arrancó produciendo contenidos para los canales “Autos” y “TC 2000” del portal Terra Argentina y luego ocupó diferentes cargos en todas las publicaciones especializadas de la editorial: Auto Test, Auto Plus, La Moto, Transporte Mundial y Maxi Tuning.
Desde comienzos de 2018 es Content Manager del multimedio digital MotorDigitalPress.