La historia del Porsche 924 que andaba al revés: ¿Por qué y qué se hizo?

Escrito por Paulo Di Renzo

En la historia de la marca, hay un modelo que no es tan conocido como, por ejemplo, el mítico 911, pero que jugó un papel importante en la evolución de la marca: el Porsche 924. ¡Sigue leyendo para conocer la increíble historia de una unidad especial!

En el marco de un experimento inusual, los ingenieros decidieron invertir la transmisión de este modelo, haciendo que el motor se conectara a las ruedas delanteras en lugar de las traseras. El resultado fue –literalmente- un Porsche que andaba al revés.

¿Cómo era el Porsche 924 y qué le sucedió a esta unidad?

El Porsche 924 fue introducido en 1976 como una alternativa más asequible al 911. Aunque al principio recibió críticas por no ser original, debido a que tenía un motor Audi de cuatro cilindros en línea y tracción delantera, resultó ser muy capaz y popular.

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Pero, ¿qué sucedió cuando los ingenieros de Porsche decidieron invertir la transmisión de este modelo? Para probar el resultado, organizaron una serie de pruebas, incluyendo una sesión en una pista de carreras y una prueba de habilidades en la que los conductores tenían que andar marcha atrás por un circuito.

Así, el 924 se desempeñó bien en ambas pruebas, demostrando que incluso conduciéndose al revés seguía siendo un automóvil altamente maniobrable y rápido. Aunque la intención no era ser una demostración de las capacidades del 924 invertido, los resultados fueron impresionantes y demostraron el potencial de la tecnología de inversión de transmisión.

Una casualidad que, en realidad, tenía su explicación

Este experimento no solo fue interesante desde el punto de vista de la ingeniería. También destacó la importancia de la experimentación y la prueba en la creación de automóviles.

Lo cierto es que el hecho de que el Porsche 924 anduviera mejor al revés no era casualidad. Unos estudiantes de ingeniería descubrieron que el vehículo contaba con una disposición aerodinámica que le permitía funcionar mejor marcha atrás que hacia delante.

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De todos modos, tanto el diseño como el funcionamiento y pruebas realizadas trascienden al 924. Concretamente, queda demostrada la importancia de la innovación y el intento de mejorar de manera constante el rendimiento, maniobrabilidad y otros aspectos de los autos.

Asimismo, el experimento del Porsche 924 invertido representa un claro ejemplo de cómo la experimentación y la innovación pueden desafiar las expectativas y llevar la tecnología a nuevos límites.