Existen determinados modelos que no necesitan ser presentados, sea una camioneta o auto independientemente del segmento al que pertenezcan. Algunos, como este de Ford, simplemente con solo verlos emanan nostalgia y nos recuerdan momento determinado de nuestras vidas. O, también puede ocurrir que el modelo en cuestión nos teletransportan a un tiempo en el que el reloj biológico circula hacia atrás y nos hace acordar de cuestiones que pensamos haberlas olvidado.
La Ford Explorer de mediados de la década del 90 es uno de esos ejemplares que pueden cumplir con esta cuota sentimental, y los responsables de @retrovintagephotos y su comunidad nos dan un ejemplo de todo esto descrito con una Explorer XLT Limited inmaculada, que arribó al país como la versión más equipada y lujosa de la marca del óvalo tras destacarse en el resto del mundo como una de las 4X4 más vendidas y que compartía un nivel de lujo similar al de otro referente de estos años, la Nissan Pathfinder.
Esta camioneta que, a partir de las categorías actuales para calificar a los vehículos, podríamos ubicar en el segmento de los vehículos deportivos utilitarios (SUV) se encuentra intacta. Vale recordar que este modelo había arribado al mercado argentino solamente en su primera generación, tras ser lanzada en 1991 en Estados Unidos.
A esta Ford Explorer no le pasó el tiempo
Uno de los aspectos que no pasa desapercibido en esta Ford Explorer es su estado conservación al presentar rastros de poco uso y un grado de entereza admirable, una condición que podemos comprobar si observamos la cantidad de camino realizado. Es que, al ver la contabilidad de su kilometraje en el odómetro marca apenas poco más de 15000 kilómetros realizados en sus casi 30 años de haber salido de la fábrica estadounidense donde fue ensamblada.
Si bien a la hora de descubrir su equipamiento podemos encontrar componentes que nos podría parecer algo común en modelos actuales como la Ford F-150, una de las camionetas más elegidas de la marca en el mercado estadounidense, en la Ford Explorer no lo era.
Aquellas versiones, independientemente del modelo, siempre fueron las tope de gama. Y esta variante no fue la excepción, traía llantas distintas a las de otras entregas, incluía estribos de serie, faros antiniebla, un portón especialmente diseñado y luces traseras retocadas. Y un bonus: un control por clave en la puerta con el que el conductor ingresaba sin la llave.
Puertas adentro encontramos un nivel de lujo destacado que se traduce en tapizados de cuero, climatizador automático, sensor crepuscular, techo corredizo eléctrico, cargador de 6 cds en la consola central, entre otros elementos. La butaca del conductor, por su parte, incorporaba varias regulaciones eléctricas.
Motorización y potencia al nivel de un SUV del Siglo XXI
La Ford Explorer Limited no tenía nada que envidiar a un SUV que se comercializa en la actualidad debido a que bajo se capot se encontraba un poderoso motor V6 de 4.0 litros capaz de producir 205 CV y 340 Nm de torque –a diferencia de las versiones full de esta camioneta generaban solamente 160 CV-.
Este corazón de hierro estaba vinculado a una caja automática de cinco velocidades con palanca al volante, con un sistema de tracción 4×4 con reductora que podía seleccionarse a través de una perilla en el tablero, otro aspecto nuevo para el momento.
