El horizonte de los vehículos eléctricos de Volkswagen se oscurece una vez más. Tras encontrarse con imprevistos con el ID.3, ahora enfrenta un revés adicional que no solo afecta a su línea de producción en Zwickau, sino que también envía ondas de choque hasta Audi.
Los problemas han golpeado con fuerza a la firma alemana. Parece que una racha de mala suerte se ha instalado en su sede, ya que, después de una disminución en las ventas de sus modelos de cero emisiones, ahora se presenta un nuevo desafío. Conoce a continuación por qué los ID.4 e ID.5 son los afectados.
La escasez de motores eléctricos, el desafío para Volkswagen
Volkswagen aplicó mejoras significativas en los modelos ID.4 e ID.5 en las últimas semanas con el fin de revitalizar sus ventas. De hecho, estas medidas se extendieron también al Audi Q4 e-tron, el cual ya está disponible en los concesionarios. Sin embargo, la falta de motores eléctricos a nivel regional obligó a frenar la producción de los modelos.
Y no se trata de un hecho aislado y casual. Al mismo tiempo, no repercute en el Volkswagen ID.3 ni en el CUPRA Born, ya que la escasez de propulsores eléctricos está relacionada con las actualizaciones realizadas, especialmente con el nuevo eléctrico trasero denominado «AP550», estrenado por el recién lanzado ID.7.
Así, el escenario plantea un desafío significativo para los SUV eléctricos ID.4 e ID.5, ya que no podrán llegar al mercado según lo planeado. Aunque para Audi este problema es relativamente menor, para Volkswagen es más grave, ya que el ID.4 es considerado la joya de la línea de modelos ID y uno de los más solicitados. Asimismo, su elevada demanda es difícil de satisfacer, ya que tanto el ID.3 se muestra muy inferior y el ID.5 superior.
Otras novedades importantes que debes conocer
La mencionada falta de motores eléctricos suficientes también se extenderá a Skoda en un futuro cercano, a pesar de que los Enyaq se producen en la República Checa. Ambos modelos de Skoda también incorporarán este propulsor, lo que hace pensar en un panorama complejo o, al menos, no tan sencillo como se preveía hasta hace unos meses.
Además, la fábrica responsable de la producción de este propulsor trasero, que ofrece una potencia máxima de 210kW (286cv) y cuenta con un sistema de refrigeración eficiente, se encuentra en Volkswagen Kassel, encargada de la fabricación de repuestos.
Como si fuese poco, no se descarta que otros problemas globales terminen agravando aún más la situación. Concretamente, así como en Brasil se padecieron retrasos con los chips, los modelos más sofisticados (tanto por sus mecánicas como por sus componentes) tienen altas probabilidades de padecer complicaciones o limitaciones.