El Rimac Nevera ha establecido una velocidad máxima de 412 km/h, lo que lo convierte en el automóvil eléctrico de producción más rápido del mundo. La hazaña récord es la continuación de la carrera de cuarto de milla en 8.582 segundos verificada de forma independiente del Nevera en 2021, suceso que lo convirtió en el automóvil eléctrico de producción con la aceleración más rápida del mundo.
El equipo de Rimac buscó específicamente un óvalo con rectas lo suficientemente largas como para alcanzar la velocidad máxima de Nevera, y finalmente se decidió por la pista Automotive Testing Papenburg en Alemania, con dos rectas de 4 km. Las instalaciones en las que es posible alcanzar velocidades de más de 400 km/h son muy pocas y distantes entre sí, ya que es muy raro que un automóvil pueda alcanzar este rendimiento.
El Nevera se configuró en su modo de velocidad máxima, creando un perfil aerodinámico que equilibra la resistencia y la carga aerodinámica para garantizar la estabilidad a alta velocidad. Equipado con neumáticos Michelin Cup 2R para carretera y con la supervisión de un técnico de Michelin para comprobar su estado, se puso en marcha la carrera récord.
Detrás del volante estuvo Miro Zrnčević, Jefe de Pruebas y Desarrollo de Rimac. Su desafío fue obtener la entrada perfecta a la recta desde las secciones curvas de la pista para darle al automóvil la mejor oportunidad posible de alcanzar el record.
Cuando el automóvil se estabilizó fuera del terraplén, viajando a unos 250 km/h, Miro desató toda la potencia del avanzado sistema de propulsión y batería de cuatro motores desarrollado por Rimac, catapultando al Nevera hasta los más de 400 km/h.
No fue hasta que Miro levantó el pie del acelerador, haciendo que el Nevera volviera a bajar a velocidades más normales de manera segura, que la noticia llegó por la radio: 412 km/h, exactamente como se simuló hace muchos años.
Lo suficientemente rápido como para convertir a Nevera en el poseedor del récord mundial del automóvil eléctrico de producción más rápido del mundo, y también en el automóvil más rápido jamás registrado en Automotive Testing Papenburg.
La velocidad máxima se midió con Racelogic V-Box, un dispositivo de medición de alta precisión basado en GPS. La velocidad máxima de 412 km/h fue un objetivo establecido por el equipo Rimac cuando el automóvil se presentó por primera vez en el Salón del Automóvil de Ginebra en 2018, y recién ahora, pudo verificarse.