
Desde su aparición en la primera generación del PEUGEOT 208, el PEUGEOT i-Cockpit no ha dejado de evolucionar al ritmo de las creaciones de la marca, manteniendo sus elementos principales: un volante compacto, para ofrecer mayores sensaciones de conducción y aumentar la maniobrabilidad, una instrumentación elevada, que se ha convertido en una lámina digital de alta resolución desde el lanzamiento del SUV PEUGEOT 3008, una pantalla táctil de alta definición, siempre al alcance de la mano y de la vista y una serie de interruptores, los “Toggle Switch” que imitan a las teclas de un piano y permiten un acceso directo y permanente a las principales funciones de confort.
El PEUGEOT i-Cockpit recurre a una estratificación a tres niveles para conseguir una ergonomía y un confort de conducción perfectos. En primer lugar, los datos aparecen justo en el campo de visión del conductor, que no necesita apartar su mirada de la carretera. Las manos son otro aspecto prioritario: los materiales son agradables al tacto, las uniones entre los elementos son perfectas, los mandos táctiles o físicos están situados en el mejor lugar.
El mando Shift and Park by Wire en la caja de cambios automática EAT8 es intuitivo y ergonómico. Las levas en el volante permiten cambios de relación en modo manual sin perder la función automática. Por último, el habitáculo forma un cockpit envolvente alrededor de sus ocupantes. Los asientos delanteros conjugan un excelente confort con una sujeción perfecta.
En el diseño de los PEUGEOT i-Cockpit se tienen en cuenta numerosas reglas de ergonomía, visibilidad y arquitectura. Los arquitectos de la marca se han guiado por datos antropométricos estudiados en numerosos tipos de población, que han permitido calcular, entre otros, los rangos de reglaje de los asientos o el volante, para reforzar la sensación de burbuja y optimizar la ergonomía a bordo, sea cual sea la corpulencia del conductor.
Con la llegada de la actual generación del PEUGEOT 208 en 2019, el puesto de conducción de la marca dio un paso adelanta con la aparición del PEUGEOT i-Cockpit 3D, que proyecta los datos a la manera de un holograma, como en un caza. Las indicaciones son dinámicas. Se acercan a la vista en función de su importancia o urgencia. De este modo, el tiempo de reacción se reduce alrededor de medio segundo. Mejora la conducción en todos los aspectos: eficacia y comodidad de lectura. La seguridad llega a unos niveles nunca alcanzados.
En el centro del salpicadero, la pantalla táctil puede manejarse tanto a través de accesos directos táctiles situados al lado de los interruptores «Toggle Switches» como por medio de un sistema accionado por la voz.
Con la llegada de los nuevos PEUGEOT 3008 y 5008 el PEUGEOT i-Cockpit ha incorporado un nuevo cuadro de instrumentos digital de 12,3”, totalmente personalizable y calibrable y con la tecnología “Normally Black”, que ofrece imágenes de calidad, con mayor contraste y legibilidad. Además, la pantalla táctil central se ha renovado, creciendo hasta las 10”.
En estos automóviles el PEUGEOT i-Cockpit se convierte en auténtico centro de control del vehículo desde el que se pueden gestionar funciones de ayuda a la conducción como Night Vision, que hace su aparición en el segmento de los SUV compactos y detecta peatones y animales en la calzada en malas condiciones de visibilidad.
El diseño del salpicadero del Nuevo PEUGEOT 308, con un sistema de climatización compacto gracias a la arquitectura “high vent” permite ofrecer un cuadro de instrumentos de tres dimensiones totalmente personalizable, para una experiencia de conducción inmersiva
A bordo del Nuevo PEUGEOT 308, el volante compacto da un paso más allá para convertirse en un elemento que participa en las funciones de ayuda a la conducción, por medio de unos sensores que detectan la intensidad del agarre por parte del conductor. Permite gestionar equipamientos como la radio, el sistema multimedia, el teléfono y varias tecnologías. Para un mayor confort, optimiza su forma ergonómica y puede contar con calefacción.
Las i-toggles virtuales totalmente configurables que sustituyen a los mandos físicos del climatizador. Situadas junto a la pantalla central, como si se tratara de un libro abierto, aportan una estética y un nivel tecnológico únicos en el segmento. Cada i-toggle es una tecla que sirve de atajo táctil hacia las regulaciones del climatizador, un contacto telefónico, una emisora de radio, el inicio de una aplicación… que cada conductor puede establecer según sus deseos o necesidades habituales.
Para una seguridad y una facilidad de uso aumentadas, el mando “OK PEUGEOT”, de reconocimiento vocal en lenguaje natural, permite acceder a todas las demandas vinculadas a las funciones de infoentretenimiento.
La conectividad da un paso de gigante con el nuevo sistema PEUGEOT i-Connect. Su función Mirroring inalámbrica permite interactuar con dos teléfonos vía Bluetooth al mismo tiempo. La experiencia se completa con el navegador conectado PEUGEOT i-Connect Advanced, y el mando de reconocimiento vocal “OK PEUGEOT”, que permite acceder fácilmente a las funciones de infoentretenimiento.
Esta tecnología también está presente en el Nuevo PEUGEOT 408, que cuenta con la última generación del puesto de conducción PEUGEOT i-Cockpit con las funciones de ayuda a la conducción más avanzadas, respaldadas por 6 cámaras y 9 radares. Entre su arsenal tecnológico destacan el Regulador de Velocidad Adaptativo con Función Stop & Go y el sistema Night Vision.