McLaren vende los clásicos de su fábrica

Escrito por Paulo Di Renzo

La marca británica McLaren pasa un duro momento económico desde que comenzó la pandemia por el COVID-19, que afectó no solo a su producción de vehículos deportivos, sino que además estuvo a punto de provocar la desaparición de su equipo de Fórmula 1.

La decisión

En la actualidad, la situación financiera mejoró y la fábrica regresó a su ritmo natural de trabajo, aunque aún se sienten reflejos de los problemas económicos. Es por eso que, para desarrollar a su último coche superdeportivo híbrido, el Artura, McLaren debió poner en marcha un plan tan creativo como increíble: ha vendido algunos modelos de su impresionante colección de coches clásicos para ayudar a financiar su nuevo modelo.

¿Cómo será el sistema?

Un portavoz de McLaren se negó a proporcionar a los diversos medios que le consultaron una lista de los vehículos que se han vendido, pero confirmó que los coches no abandonarán la fábrica. De hecho, quienes han adquirido uno de estos vehículos están recibiendo la licencia de McLaren, pero se quedarán en la sede de Woking. McLaren espera volver a comprar toda la colección como parte de su plan de recapitalización que involucra a los accionistas, y que espera haber finalizado en el primer trimestre del próximo año, según explicaba este portavoz.

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¿Qué valor aproximado tiene la colección?

McLaren ha estado tratando de vender su colección durante al menos dos años, pero la compañía había recibido el rechazo de los acreedores constantemente. Según la propia McLaren, hay alrededor de 54 vehículos en la colección y señala: «Hay un mercado para estos activos, y el Grupo puede determinar como de apropiado es vender un número específico y limitado de estos coches a coleccionistas especialistas de todo el mundo».

A 31 de diciembre de 2021, la colección patrimonial valía el equivalente a unos 40 millones de euros, según el mismo informe anual. Eso no es una sorpresa para una colección que incluye coches de Fórmula 1 conducidos por Niki Lauda, Alain Prost, Ayrton Senna y Mika Häkkinen, además del auto que llevó a Lewis Hamilton a su primer Campeonato Mundial.